Son escasos los árboles que se adaptan tan bien a todo tipo de terrenos como los olivos.
El olivo es un árbol rústico que puede crecer en diferentes tipos de campos.
De todos modos, uno de los cuidados esenciales está centrado en la calidad de los suelos. En ese sentido, es fundamental generar buenas condiciones de los terrenos.
¿En qué consiste el cuidado del suelo para el crecimiento de olivares?
Diferentes estudios han demostrado de qué forma hay que cuidar los terrenos para el buen crecimiento y desarrollo de árboles de olivo.
En esa línea, el proyecto europeo Soil O-live, encabezado por la Universidad de Jaén recolectó más de 5.200 muestras en 52 parcelas ubicadas en distintos puntos de Europa y del Norte de África. Tal estudio tiene como objetivo analizar el efecto del manejo agrícola en el estado de los suelos de los olivares mediterráneos.
Tal propuesta también se enfoca en el estudio del impacto sobre la producción y calidad de los aceites de oliva producidos en la región mediterránea.
Los investigadores, siguiendo los protocolos establecidos por la Unión Europea, tomaron cinco réplicas en cada una de las parcelas a dos profundidades diferentes: 10 y 20 centímetros. De esta forma, es posible analizar los efectos de la actividad agraria en diferentes estratos del suelo del olivar.
Cabe aclarar que los terrenos elegidos presentan distintos sistemas de cultivo del olivar: tradicional, intensivo y ecológico.
Asimismo, las muestras fueron tomadas en diferentes puntos del Arco Mediterráneo con tradición olivarera, como el Sur de Portugal, la isla de Lesbos, Creta, la región de Kalamata (Grecia), Toscana, Lazio y Sicilia (Italia), Marruecos y el Sur de España.
Después de la recolección, los especialistas procesaron dichas muestras de suelo en el laboratorio para proceder a obtener los primeros datos.
Los investigadores manifestaron que las muestras recogidas permitieron tener una imagen precisa y actualizada del estado de los suelos del olivar.
Desde allí, los establecimientos seleccionados donde el suelo está más desmejorado tendrían la posibilidad de implementar programas de restauración. El objetivo es fomentar prácticas como la aplicación de biocarbón y el mantenimiento de las cubiertas vegetales.
Sobre el proyecto
El proyecto Soil O-live está formado por 17 socios y cuenta con una financiación de casi 7 millones de euros en el marco de la Misión Soil Heath and Food del programa de I+D+i Horizonte Europa (programa marco de investigación e innovación de la Unión Europea para el período 2021-2027).
Además, el proyecto está formado por quince instituciones académicas y dos empresas del sector del olivar. A nivel nacional, el proyecto cuenta también con la participación de la Universidad de Jaén, que actúa como coordinadora, con la participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) a través de tres centros de investigación (Estación Experimental del Zaidín, Instituto de Agricultura Sostenible y Estación Experimental Aula Dei) y la Universidad de Castilla La Mancha.
A nivel internacional, intervienen instituciones como la Universidad de Roma Tre de Italia, la Universidad Libre de Berlín de Alemania, la Universidad de Tras-Os-Montes e Alto Douro de Portugal, la Universidad del Egeo y la Universidad Helénica del Mediterráneo de Grecia, la Universidad de Silesia en Katowice de Polonia, la Universidad de Palermo de Italia, el Consejo Nacional de Investigación de Italia – Bari (CNR), la Escuela Nacional de Agricultura de Meknes de Marruecos y la Universidad de Berna de Suiza.
Como empresas del sector participan Nutesca S.L. y la empresa multinacional DEOLEO GLOBAL S.A, además de la participación de la Agencia Española de Estandarización UNE.
¿Cuáles son los principales objetivos del proyecto Soil O-live?
Soil O-live tiene como objetivo analizar el impacto de la contaminación y la degradación de la tierra en los suelos de olivar en cuanto a:
- La biodiversidad.
- La función ecológica en distintos niveles de organización.
- La investigación del vínculo del estado de los suelos y la calidad y seguridad del aceite de oliva.
- La implementación de enmiendas para la restauración del suelo.
- El uso de prácticas de reparación ecológica que promuevan mejoras en la biodiversidad y la funcionalidad del suelo en olivares mediterráneos permanentes en su área de distribución nativa, que deberían traducirse en la buena calidad del aceite de oliva.
- La definición de lineamientos para accesos ecológicos que permitan implementar futuras normas y reglamentos para proyectar una certificación novedosa en relación a suelos saludables en los olivares.
Dicho esto, la conclusión es que el cuidado del suelo se traduce en un buen crecimiento y desarrollo de los olivares. Al mismo tiempo, las buenas plantaciones favorecen a la calidad del producto final que es el aceite de oliva. De esta manera, se fijan las bases para que los árboles sean sanos y estén bien cuidados. Y es en esa línea que se seleccionan los ejemplares y se prepara el lugar para la plantación de los mismos.